El morbo de la tentación

... llegó un día...

... llegó un día y Alba se cruzó con un tipo misterioso, agradable...

y allí estaba él...

...al día siguiente...

... al día siguiente cuando Alba salió del ascensor volvió a cruzarse con él... qué curioso... nunca antes lo había visto y de repente estába ahí...

...pasaron los días...

... pasaron los días y el tipo misterioso estaba en cada rincón que Alba podía cruzar... en la puerta de su oficina... en la cafetería del boulevard, al salir de esa tienda de moda que tanto frecuentaba ella.

Y allí estaba él...

... cuando de repente...

... cuando de repente el morbo de la tentación la inundó... es tan misterioso... es tan erótico... es tan... tentador... él se convirtió en su obsesión.

Alba decidió cambiar de hábito, nuestro hombre le llamaba demasiado la atención. Y... oh... sorpresa! de nuevo apareció, desnudándola con la mirada y Alba con su mejor conjunto de ropa interior... el deseo la inundaba...

Y allí estaba él...

...llegó el día...

... llegó el día y esta vez no fue casualidad... Alba provocó el encuentro, deslizó su sonrisa más seductora, desató su instinto interior...

Y allí estaba él...

El misterioso caballero la llevó a su apartamento, la desnudó, y Alba absorvió su pasión...

Allí estaba él... Luca, el marido de Alba, excitado al ver a su mujer en los brazos de un extraño.

Y allí estaba él... mirando desde un rincón, disfrutando del morbo de la tentación.